Salud Integral en el hombre

 

Cada día tenemos más casos de hombres que no están en búsqueda del embarazo, pero que no llegan a tener una salud masculina plena, a pesar de no tener una alteración diagnosticada. “Estar sano no es ausencia de patología” y somos conscientes de que antes de que lleguemos a ese punto se pasa por un proceso de pre-enfermedad en el que estamos a tiempo de ayudar y modificar los hábitos que nos puedan llevar a esa enfermedad en sí.

En Onêt queremos que el hombre esté sano, sí, pero sobre todo que se sienta sano. Y es por esto que tenemos un equipo multidisciplinar para poder ayudar también a la salud masculina de forma integral, ya que en la sociedad en la que vivimos hemos normalizado muchos síntomas que no deberíamos padecer:

  • Te levantas a cansado o con falta de energía.
  • Cuando llegas al final del día y estás agotado.
  • Tienes picores corporales.
  • Si tienes problemas intestinales (estreñimiento, heces blandas, muchos gases…)
  • Tienes digestiones pesadas, acidez, te sientan mal ciertos alimentos o tienes intolerancias alimentarias.
  • Si Te sientes inflamado.
  • Tienes sobrepeso u obesidad.
  • A pesar de perder peso y seguir una vida sana sigues teniendo el abdomen inflamado.
  • Tienes un nivel de estrés muy elevado. Dolores de cabeza. Insomnio.

Y podríamos seguir con muchos más síntomas, pero lo importante es cómo te sientes tú.

Si crees que podemos ayudarte…

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Fertilidad Masculina: ¿Qué es y qué la afecta?

 

El hombre es el 50% del embrión, y la salud del futuro padre influirá en la del deseado bebé, es por esto que ponemos mucha atención en el estudio de la Fertilidad Masculina.

Somos conscientes que en los procesos de reproducción asistida no se le da la importancia que merece al factor masculino, y que en el caso de que haya alteraciones espermáticas se “solucionan” con una técnica de reproducción asistida como una FIV o una ICSI. Pero nuestra mirada de la medicina reproductiva integral no es tan simplista.

El esperma es mucho más que cantidad, movilidad o morfología, y trabajando desde este prisma mejoramos las tasas de éxito de los tratamientos de reproducción asistida.

Para nuestro equipo es vital realizar un amplio estudio de la fertilidad del hombre, y no solo un seminograma, sino ir más allá: valorar si hay fragmentación espermática, alteración en los cromosomas del espermatozoide, valorar si hay una correcta Microbiota seminal y por supuesto infecciones genitales.

Pero no nos quedamos ahí, porque se ha demostrado que una inflamación crónica de bajo grado afecta al ADN espermático, alteraciones hormonales, alteraciones digestivas, disfunción tiroidea, déficit de minerales y vitaminas… Todo ello interfiere en la fertilidad del hombre.