Hoy vengo con un temazo, lo sé, hace unos años ya os hablé de este tema, pero hoy quiero hacerlo con más información y con más estudios. Madre a los 40.
¿Ser madre después de los 40 años es posible?
La respuesta es que sí, pero con muchos matices.
Empecemos por el principio, sabemos que la biología manda. Y que, aunque nos sintamos muy sanas y jóvenes, y los 40 de hoy en día no parecen los 40 de hace unas décadas. Nuestra biología sigue siendo exactamente la misma.
Conseguir un embarazo natural después de los 40 años no es tarea sencilla. Porque nuestra reserva ovárica desciende con la edad, la calidad de los óvulos empeora con el tiempo y las alteraciones cromosómicas de los mismos aumentan con los años. ¡Esto hemos de tenerlo clarísimo!
Dicho esto, no podemos decirle a una mujer con 40 años que no podrá ser madre. oSlo por tener esa edad, eso es lo que NO me parece bien. El porcentaje es menor, por supuesto, pero no significa que no pueda serlo.
Estamos acostumbradas a ver mujeres con 40 que vienen de clínicas de reproducción asistida en las que solo por su edad directamente las han derivado a ovodonación (recepción de óvulos de donante). Y eso, sin haber hecho un estudio previo y preparación, no me parece justo.
Si estamos ante una mujer que su reserva ovárica es prácticamente cero o su FSH está en niveles cercanos a la menopausia, entiendo que se derive a ovodon, pero si esos valores están correctos, mi gran pregunta es, ¿por qué no intentarlo, sin además antes haber hecho un estudio real de la situación?
Obviamente hay que hablar con la paciente y saber qué quiere ella. Porque si a la mujer no le importa recibir óvulos de donante, adelante. ¡Siempre tendrá tasas más elevadas de tener un bebé en casa! Pero si esa mujer, o pareja, no quiere, no lo acepta, ¿qué hacemos?
Hace un tiempo leí los porcentajes de éxito de una de las clínicas más reconocidas de este país, Equipo Juana Crespo. Decían que el porcentaje de embarazo que tenían en mujeres con una edad media de 41.5 años, era del 59.24% con óvulos propios. Y la verdad es que me sorprendió muy gratamente. Porque sé de buena tinta que ellas sí luchan por el material genético de la mujer hasta el final. Y creo que todas las mujeres se merecen ser vistas así.
Estamos todas de acuerdo que la edad es un hándicap, uno de los más importantes para la fertilidad, por supuesto, pero no es el único. Por eso escribo hoy este post, porque los profesionales tenemos que esforzarnos todo lo posible para ayudar a aquellas mujeres que nos piden ayuda.
No podéis ni imaginar la cantidad de mujeres que se ponen en contacto con nosotras porque la única opción que le han dado es la ovodonación. Sin mirar nada más que la reserva ovárica y funcionamiento de los ovarios. Y que trabajando y descubriendo cosas hemos visto que había una alteración autoinmune que afectaba al funcionamiento de sus ovarios, a la implantación del embrión, alteraciones en su Microbiota endometrial, problemas de coagulación, déficits importantes de nutrientes….
A ver si nos damos cuenta ya de una vez que la fertilidad no son unos ovarios y un útero, ¡que somos muchísimo más!
Y que le demos a los pacientes la información veraz, las probabilidades, las opciones y que ellas, una vez informadas, elijan y respetemos su elección.
Siempre que tenemos en consulta este tipo de casos, lo primero que os digo es, “Yo no puedo cambiar la dotación cromosómica de tus óvulos. Pero sí puedo dejar el terreno lo más fértil posible para que cuando llegue esa semilla (embrión) decida quedarse o no”. Pero que eso solo dependa de ese embrión, no de tantas cosas que le influyen y que no se han tenido en cuenta y son importantes.
La edad no se puede cambiar, pero todo lo demás sí.
Hace no mucho hice una encuesta por Instagram, para conocer la edad de las mujeres que estaban teniendo problemas para conseguir tener un hijo, y me llamó la atención que había más mujeres menores de 37 años con problemas de fertilidad que mayores de 37 … Quizá no solo es la edad un hándicap, quizá hay más cosas a tener en cuenta, ¿no?
Y una vez ya me he desahogado, vamos a lo importante, ¿podemos mejorar la calidad de los óvulos?
Pues depende, ¡como todo! Si hablamos de una mujer de 46 años con alteraciones de ciclo que nos está dejando ver una perimenopausia, va a ser difícil conseguir mejorar la calidad ovocitaria. Pero en otros casos sí podemos, por eso es tan importante personalizar y valorar en consulta, no se trata de tomar un suplemento y ya está.
He tenido la suerte de poder formarme como Embrióloga y complementarlo con medicina y nutrición Ortomolecular, suplementación basada en evidencia… Esto me ha hecho sumar de ambas partes, y sé que podemos mejorar nuestras células, sólo hay que entender cómo funcionan y qué necesita cada organismo.
Podemos ayudar a los óvulos con antioxidantes, minerales, vitaminas, aminoácidos, ácidos grasos…Pero lo más importante es que podamos mejorar el sustrato, nuestro organismo: la Detoxificación hepática, que nuestra Microbiota esté bien, que eliminemos la inflamación crónica de bajo grado que oxida nuestras células, que detectemos si existe resistencia a la insulina. Por ejemplo, porque afectará a la calidad del óvulo, que trabajemos sobre el hiperestrogenismo. Que nos tomemos en serio los disruptores endocrinos, que mejoremos el líquido folicular, que rebajemos la fragmentación del ADN….
Porque sí está demostrado que todo esto afecta negativamente a la calidad de los óvulos, sabemos que al eliminarlo o equilibrarlo, estamos mejorando la calidad, ¿no?
¿Qué nos puede ayudar a mejorar nuestra fertilidad, ye convertirnos en madr a los 40 (o a la edad que tengamos)?
- Primero saber cómo estás, detectar alteraciones, y no solo de la hormona antimulleriana o la FSH. Tener en cuenta la insulina, la tiroides, vitamina D, vitamina B12, B6, A, C, homocisteina, proteína C reactiva, los diferentes estrógenos, andrógenos, Microbiota intestinal y endometrial, tus niveles de selenio, de zinc, de cobre, si hay intoxicación de metales pesados, si tienes una reactivación de algún virus, las natural killers, cómo funcionan tus glándulas suprarrenales, si generas demasiado cortisol en sangre, tu histamina y muchíiiiiiiisimo más…
2. Una vez ya tenemos nombres, ponerles la solución.
- Suplementar con Coenzima Q10 (ubiquinol), con Vitamina E, Vitamina A, Mioinositol, Magnesio, Vitamina C, ácidos grasos de calidad (omega 3), L-Arginina, Melatonina, glutamina….
- Tener una alimentación adaptada a tu caso porque no es lo mismo tener una resistencia a la insulina que un hiperestrogenismo.
- Tomarnos en serio la gestión del estrés, ya que es un tóxico para nuestro organismo y además nos inflama y oxida.
- Tener en cuenta el ejercicio físico, adaptada a cada mujer y patología.
- Respetar los ritmos circadianos.
- Tener una buena higiene del sueño.
(De todo esto y mucho más, os dejo estudios en la bibliografía que encontraréis al final de este post.)
3. Para terminar, no olvidemos que somos más que un útero y unos ovarios.
Y que, por supuesto que lo más adaptado a nuestra biología es tener hijos con 20 años, sí, lo sabemos, ¿pero podemos? Ojalá fuera tan sencillo, ¿verdad?
Consejo: si eres joven y quieres ser madre, por favor hazte un estudio de fertilidad. Cada día hay más mujeres jóvenes con baja reserva ovárica, y así podrás plantearte tu vida reproductiva.
Si no sabes dónde, podemos informarte sin compromiso.
Lo más importante es que tengas la información, para así poder decidir, pero si tienes 40 años y te han dicho que a ovodon, también tienes derecho a conocer que hay más mundo además de esa opción. Y exige que se te trate como un ser integral, que se hagan los estudios pertinentes, que se tenga en cuenta lo que comes, lo que duermes, lo que piensas, lo que sientes… insisto, no somos unos ovarios y un útero.
Os dejo algunos de los estudios publicados:
- Contaminación y fertilidad.
- La relación entre la TSH (tiroides) y el éxito reproductivo.
- Insulina y Fertilidad.
- Inflamación (proteína C reactiva) y fertilidad.
- CoQ10 y mejora de tratamiento en SOP.
- CoQ10 ayuda a mejorar óvulos y calidad de embriones.
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El papel de las mitocondrias desde el ovocito maduro hasta el blastocisto viable
- Vitamina D y Fertilidad.
- Melatonina y Fertilidad.
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El tratamiento a largo plazo con melatonina retrasa el envejecimiento ovárico
- Omega 3, inflamación y embarazo.
Omega 3 Circulación sanguínea (implantación y abortos)
- Ácidos grasos poliinsaturados omega-3 y tratamiento de FIV
- Ácidos grasos omega-3 séricos y resultados del tratamiento en mujeres sometidas a reproducción asistida
- Reserva ovárica y tóxicos.
- Tóxicos y endometriosis
- Dioxinas-desarrollo endometriosis-inflamación.
- Disruptores endocrinos y SOP.
- Sedentarismo
- Alimentación (disruptores endocrinos, resistencia insulina, inflamación, exceso estrógenico…)
- Estrés (inflamación, sistema endocrino, sistema inmune..)
- Alteración de ciclos circadianos (melatonina, cortisol, sistema inmune…)
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Alteración de los ritmos circadianos: un factor crucial en la etiología de la infertilidad
Y no quiero olvidarme de la gran suerte que he tenido de poder formular un complemento para mejorar la calidad ovocitaria, basado mis más de 17 años como Embriologa. El complemento Fertility Formula ¡que ya nos está dando grandes alegrías!
Recordar que si aplicáis el código ONET5BL en el momento de la compra podréis beneficiaros de un 5% de DESCUENTO.
Además, aquí podréis ver dos ponencias que hice para explicar mejor su composición y cómo puede ayudar a la fertilidad:
- Ponencia para profesionales
- Ponencia para mujeres que buscan un embarazo
Si tu sueño es quedarte embarazada, si ser madre después de los 40 ¡Estamos aquí para ayudarte! Contáctanos y te ayudaremos encantadas.